Resulta que con motivo de los festejos del Bicentenario* las clases fueron suspendidas. ¡Oh si! ¡Qué felicidad! ¡Tres días libres huju! pues que padre para los que lo vayan a disfrutar en total libertad y los que no, bienvenidos a mi mundo.
Yo durante estos días estaré haciendo mis más de 50 páginas de literaturas, mis más de 25 de inglés, mis dos ensayos sobre Porfirio Díaz y un collage de su gobierno así como mis cuatro investigaciones sobre temas administrativos. Todo es mano.
¡Qué diversión!
*Ya no soporto esta palabra.
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